viernes, 13 de septiembre de 2013

UN LAAAARGO SEXENIO QUE APENAS INICIA

13 de septiembre. En México hoy se recuerda a los niños héroes, pero y a pesar de la fecha, no escribiré sobre ellos. El día de hoy México sufre una nueva injusticia, un nuevo golpe, sólo que esta vez no es dado por una mano extranjera sino por una mano hermana, paisana, compatriota. Los heridos esta vez no son niños, pero son los profesores de nuestros niños, de nuestros jóvenes. Si bien no perdieron la vida el día de hoy, en cada momento son despojados de lo que les da vida, de sus derechos laborales, del respeto y de la esperanza de justicia en nuestro país.
Hace menos de un año subió al poder Enrique Peña Nieto, dentro de un gran despliegue de "seguridad" a su alrededor para evitar una agresión hacia nuestro muy querido y recién ganador de la subasta presidencial. La policía temía que las grandes muestras de afecto al festejar este suceso pudieran lastimarlo.

El IFE respaldó la transacción realizada y la vida siguió...

Desde que compró ese puesto, EPN llegó con mucha hambre de cambios. Sabe que no goza de la aceptación popular así que qué más daba iniciar el desmantelamiento de México recién llegó.
Ha propuesto una reforma laboral en la que la esclavitud masiva se hace legal:
"Dentro de unas pocas semanas será legal en México contratar a trabajadores por horas y no necesariamente por jornadas de ocho horas al día, con un contrato de prueba o capacitación y no forzosamente con uno definitivo, agregar fuerza laboral mediante outsourcing o subcontratación, y el pago por salarios caídos (los que el empleado deja de percibir entre su despido y una sentencia judicial favorable) tendrá un tope de un año, más intereses, en los casi siempre eternos litigios por despido."
Por cierto, se propuso 8 pesos mexicanos como pago por hora. ¡8 pesos! ¿uno o dos chicles? El pasaje en autobús cuesta eso aproximadamente, si tomamos en cuenta que para llegar a su trabajo un empleado puede usar hasta 2 autobuses, pues...
Se le ha ocurrido también la grandiosa idea de una reforma energética, en la cual él jura y perjura que el petróleo seguirá siendo tan nuestro como siempre, je je, bueno, no lo dijo así pero ésa realmente sería la única forma de no mentir en su discurso. PEMEX es una empresa que deja mucho dinero, aunque a nosotros los mexicanos nos diga que no es rentable. Es cierto que hace falta una reforma de manera urgente para que los mexicanos veamos claro, pero la reforma que necesitamos no es la "renta" (¿renta? ¿van a usar el petróleo un rato y luego nos lo devuelven?)
 
Los gobernantes juegan turista mundial con nuestro país. Y al menos un sector se ha levantado inconforme pero hoy ha sido golpeado (literal y metafóricamente) en un país en el que muchos se molestan por las manifestaciones y es que no nos apreciamos como un todo y mientras "a mí no me afecte" pues es fácil decir: "que se pongan a trabajar, pinches huevones". Pero tal como van las cosas... A todos no va a tocar. Es sólo cuestión de tiempo.